CAMPAMENTO NOCTURNO

Premio al Talento Mayor

En las Dunas de La Chimba pude ver –desde la altura– la ciudad encendida, como un bosque en llamas. De pronto, al bajar la vista, en un par de segundos, todo se había apagado: Era la camanchaca que bajaba implacable, humedeciendo hasta los pensamientos, para deleite de las copiapoas y cactus San Pedro que querían apagar su sed. Fueron minutos en que la luna desapareció, y se borraron las sombras pétreas, dejándome envuelta en el frío de la garúa nocturna. Luego, la ciudad volvió a encenderse como un bosque en llamas.

Patricia Carrizo Carvajal, 66 años
Antofagasta