FAMILIA INCLUIDA

Mención Honrosa

La conocí en Condell, fuera de un cabaret barato. Era brasileña y tenía veinte años, también tenía un tatuaje en la pantorrilla. Me sonrió, me invitó a pasar, me preguntó si quería invitarla a un trago y le dije que sí. Me contó que era de Manaos, que su prima la había traído a Chile seis meses atrás. «Seis meses en un puterío es una eternidad», dijo en mal castellano. Dos veces más la vi y la invité a un trago. Luego desapareció. Luego la vi caminando por el mall de la mano de mi padre. Luego volvió a desaparecer.

Víctor Escobar Díaz, 32 años
Antofagasta

Ilustración: Ovnie