PISANDO FIRME Y VOLANDO ALTO

Mención Honrosa

Pasaron por el Mercado para comprar las cosas del almuerzo. Sabían que en la casa había un paquete de arroz. Ya estando en el paradero, se dieron cuenta de que se hacía tarde y que las bolsas cortaban sus dedos. Ella y los niños se subieron a una 7, la que llega más alto en la ciudad. Se bajaron donde siempre y comenzaron a caminar lentamente. A los tres les empapaba el cansancio en la espalda. Claudita iba como flotando cuando preguntó: Mamá, ¿por qué vivimos tan arriba?. Camina no más, hija, que este es un atajo al cielo.

Lesley Prieto, 25 años
Antofagasta

Ilustración: Alberto Montt